Eduardo Estrella asumió este miércoles como ministro de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) por segunda ocasión. La primera vez que dirigió la institución fue desde 1991 hasta 1994 en el Gobierno del fenecido presidente Joaquín Balaguer.
El acto de toma de posesión, que se llevó a cabo en la sede de la institución, fue encabezado por la vicepresidenta Raquel Peña, según una nota de prensa.
«Lo que vengo a servir, llegar al Ministerio de Obras Públicas es como regresar a casa, y lo hago con el firme propósito de continuar las iniciativas que están cambiando la vida de los dominicanos», expresó Estrella durante la actividad.
Asimismo, agradeció al ministro saliente, Deligne Ascención, a su equipo de trabajo y a todos los colaboradores de la entidad por la cálida bienvenida y el acompañamiento en esta nueva etapa.
Sus prioridades
Estrella subrayó que dentro de sus prioridades inmediatas está la conclusión de importantes proyectos en ejecución, así como el avance de nuevas obras que mejorarán la movilidad, la conectividad y la calidad de vida de los ciudadanos.
«Trabajaremos con determinación para garantizar la entrega de infraestructuras claves para el desarrollo del país, agilizando procesos, optimizando recursos y asegurando que cada obra tenga un impacto positivo y duradero», señaló.
Mientras que el funcionario saliente, Deligne Ascención, expresó que constituye «un gratísimo honor el saber que, en muy buenas manos, está el esfuerzo que durante todo este tiempo hemos desarrollado, y no solamente se continuará con la experiencia, el liderazgo y con el compromiso de Don Eduardo, esto es seguro que se va a potenciar».
Sostuvo que varios de los proyectos que se han desarrollado en Santiago son iniciativas de Estrella,» que cualquier iniciativa nos la manifestaba».
Al respecto, dijo que sus sugerencias siempre encontraron un espacio en MOPC, como los casos de la entrada de Santiago, la terminación de la carretera Turística, la circunvalación de Navarrete, entre otras.
Ascención se puso a su disposición del nuevo ministro, «a la hora que fuere para que lo que usted considere que pudiéramos ser de utilidad, siempre vamos a estar prestos».